Me apunto a la tendencia de las mechas babylights
Cada vez más morenas filtreamos con el rubio y me incluyo porque yo soy una de ellas. Antes era oír hablar de cambiar de tono de pelo y se me ponían los pelos de punta. No quería que me nombraran ni siquiera las mechas y eso que, cuando iba a la peluquería, mi estilista siempre me recomendaba hacerme alguna para dar un toque de luz a mi apagado cabello.
Hasta que surgieron las mechas babylights y ya la cosa no me parecía tan terrible. Es más una vez que las probé ya no quise volver a mi «plano» tono de cabello.
Pero, como pasa con todo, hay que tener mucho cuidado en manos de quien nos ponemos a la hora de realizar esta técnica.
Hace unos meses, de hecho, me hicieron un estropicio importante en una peluquería – de cuyo nombre no quiero ni acordarme – y desde entonces prometí que nunca más dejaría mi pelo en manos de cualquiera.
Por ello, en esta ocasión, he escogido David Künzle (Calle Ponzano, 42, Madrid), uno de los salones de peluquería de referencia de la capital en el que son expertos, entre otras muchas cosas, en este tipo de técnica.
El mismo David Lesur, propietario del salón, fue el encargado de asesorarme y recomendarme cuál era el mejor tono de rubio para mis mechas babylights.
Al ser verano, «debemos tener en cuenta que se está manipulando que se está manipulando peróxido de hidrógeno de altos volúmenes y productos decolorante volátiles y altamente peligrosos. Además, en lugar de llegar al rubio deseado, el cabello puede quedar de un color naranja oxidado o con un amarillo nada favorecedor».
Por ello, David me recomendó no optar por un tono de rubio demasiado claro ya que se podía aclarar más aportando un aspecto contrario al deseado (como si tuviera el «pelo frito», por así decirlo).
Junto con las californianas, las babylights son la mejor opción de cara al verano, tal y como me comenta David.
“Siempre aconsejo y practico la técnica de mechas californianas, ya que reproducen a la perfección un crescendo de color tal y como lo hace el sol y el mar de manera natural en nuestro pelo, cuando estamos de vacaciones en la playa, empezando con una raíz más oscura que se va aclarando a medida que llega a laspuntas. También trabajamos con la técnica de mechas babylights, muy sutiles para las queoptan por cambiar de color de una forma gradual y discreta”.
Además, ambas técnicas son las que menos dañan al cabello, las que menos mantenimiento necesitan y las que requieren un cuidado prácticamente normal, por eso son también las más demandadas y las más adecuadas para personas como yo que buscamos algo un mantenimiento bastante sencillo.
También aproveché la visita para sanearme el pelo y hacerme un corte cómodo para pasar el verano.
Así que, una vez más opté por un corte bob con capas un poco por debajo de la barbilla que me permite jugar con varios estilos (liso o rizado).
Os enseñaría el resultado pero mi móvil sigue en el servicio técnico y mi cámara de fotos también está estropeada pero pronto espero poderos enseñar el resultado.
Y, para finalizar, destacar además de la profesional tanto de David Lesur como del resto de estilistas del salón de David Künzle y su excelente trato.
Es la segunda vez que voy y el trato siempre es impecable.
Me encantaría ponérmelas porque dan mucha luz a la cara.
Me gusta mucho como quedan!