10 consejos para una piel protegida en invierno
El invierno es una de las épocas del año en la que más sufre nuestra piel debido a las bajas temperaturas que debe soportar.
El frío perjudica la piel ya que altera su manto hidrolípidico (capa exterior de la epidermis encargada de mantener la piel hidratada) resecándola, deshidratándola e irritándola y provocando así sensación de tirantez y/o descamación.
Pero no sólo el frío daña nuestra piel. Los rayos UVA y UVB también afectan a nuestra piel.
La radiación UVB es menor en invierno que en verano pero la de UVA es casi igual en ambas épocas del año y, por ello, es muy importante protegerse del sol también en invierno.
Así que es muy importante tener en cuenta unos cuidados básicos para hidratarla y protegerla.
Y la Dra. Adriana Ribé, Médico Dermatopatóloga y Directora de Ribe Clinic, nos da 10 consejos para mantener la piel protegida en invierno en este decálogo.
1. Una buena limpieza de la piel. Siempre hay que limpiar bien la piel. Hay que eliminar el maquillaje o productos cosméticos que utilicemos.
Muy importante en invierno, usar productos o técnicas que no la resequen.
La doctora nos recomienda ir a centros especializados donde enseñen a limpiarla en profundidad.
2. Hidratar. En invierno el frío, el viento y la sequedad del ambiente resecan mucho la piel.
Así, hay que buscar cremas que contengan principalmente, ácido hialurónico
y glicerina para hidratarla bien.
Actualmente hay cremas muy novedosas que ayudan a mantener más tiempo el agua en la piel y aprovechar mejor el agua que tenemos.
Estas cremas tienen compuestos tan novedosos como xylitol, combinado
con glicerina y vitamina PP (B3) que restauran la barrera lipídica, aportan
flexibilidad, evitan la pérdida de agua y favorecen la circulación de agua interna.
3. Relipidar: Además, si queremos proteger más la función de barrera de la piel, hay cremas con lípidos estructurales.
4. Protégete del sol. Si bien es cierto que en invierno percibimos menos la sensación de “exposición al sol”, los rayos siguen incidiendo en nuestra piel.
Éstos tienen varios componentes principales, que son rayos ultravioleta A, B e infrarrojos.
5. En invierno es muy importante hidratarse también por dentro y beber mucha agua, comer fruta y aprovechar que nos apetece más tomar bebidas calientes como té e infusiones.
6. La diferencia de temperatura del exterior al interior puede irritar la piel, sobre todo si es una piel muy sensible. Por eso es conveniente evitar cambios bruscos de temperatura y no poner la calefacción muy fuerte.
7. Añadir frutos rojos o frutas que contengan vitamina C a nuestra dieta ya que son antioxidantes e impiden la acción de los radicales libres.
8. Si necesitamos unos cuidados más intensos, la doctora nos recomienda la
mesoterapia con vitaminas (en el caso de las pieles más deshidratadas y con un tono apagado) o el oxígeno con células madre (para las pieles más desgastadas y agotadas por su capacidad regenerativa).
También, la carboxiterapia nos ayudará a oxigenar las células de la piel y harán mejor sus funciones (regeneración y reparación).
9. Tomar suplementos vitamínicos con vitamina C, ácido hialurónico, biotina, y colágeno hidrolizado, prolina, lisina y glicina.
10. ¿Qué tipo de cremas debo utilizar? Cremas hidratantes con ácido hialurónico y colágeno y antioxidantes (vitamina C, vitamina E), cremas hidratantes con xilitol, glicerina y vitamina PP (B3), cremas para pieles sensibles con complejos calmantes, inhibidores de formación de mediadores pro-inflamatorios y componentes que fortalezcan la barrera cutánea aumentando la síntesis de lípidos epidérmicos y fibras de filagrina.
Comienza la operación hidratación y con estos consejos os aseguráis una piel protegida durante todo el invierno.
Suelo hacer todos, pero nunca había oido hablar de las cremas con lípidos estructurales.
Besitos