Al dilema de qué factor de protección solar escoger, ahora se nos une también el de que textura nos conviene más.
Y digo ahora porque la textura que antes solíamos escoger siempre era la crema ya que el único aceite que usábamos era el de Johnson's Baby (¿quién no ha cometido esta locura alguna vez?).
Pero, hoy en día, tenemos más variedad dónde elegir y se nos plantea la duda de si es mejor usar aceite, bruma, crema o dry oil (aceite seco).
En este post, espero despejaros la duda con los pros y los contras de cada una de estas textura que nos cuentan desde los Laboratorios Valquer.
Cómo escoger la textura del protector solar
Aceites
Antiguamente el aceite era sinónimo de poca protección solar o incluso ninguna pero los laboratorios han ido innovando para crear aceites que incluyan factores muy altos.
Pros
Una de las ventajas del aceite es que perduran mucho sobre la piel al irse absorbiendo poco a poco. Ésto hace que la protección dure mucho.
Esta opción es ideal para aportar hidratación a las pieles muy secas.
Además, otra de las ventajas es que la piel queda suave y con un toque satinado que sienta genial cuando estamos bronceados.
Contras
Sin embargo si tenemos la piel grasa o con tendencia acnéica, debemos evitarlos.
Otro de los contras es que si el aceite es de mala calidad puede dejarnos la piel con sensación pringosa al quedar en la superficie de la piel.
Y no sólo eso. Al no llegar a penetrar en la piel es que el protector solar se puede quedar en la toalla al mínimo roce quedando así desprotegidos ante el sol.

Cremas
Aunque existan otras texturas, la crema sigue siendo la opción que más utilizada.
Pros
Una de las mayores ventajas es que cunden mucho y con poca cantidad se puede abarcar bastante piel.
Dentro de las cremas podemos encontrar diferentes variedades para elegir así que mejor se adapten a las necesidades de la piel.
Hay cremas sin aceites, con o sin perfume, más ricas, más ligeras, de tacto seco (no dejan sensación pegajosa)...
Contras
Algunas cremas solares con alta protección solar pueden ser demasiado untuosas dificultando así que extiendan y absorban fácilmente.
Aceite de tacto seco
Una textura que ha hecho que perdamos el miedo al aceite es el aceite seco.
Pros
Su mayor ventaja es, sin duda, su rápida absorción lo que permite que resulte muy cómodo y práctico.
Además, no deja sensación pringosa así que no hay que temer rozar siquiera la arena por temor a parecer una croqueta.
Contras
Si el aceite seco es en spary conviene aplicarlo cerca de la piel y extenderlo para asegurarnos una protección solar adecuada.
Spray/Bruma
Si hay una textura que gana a la crema esa es que, con el tiempo, ha ido ganando seguidores.
Pros
Lo mejor de este tipo de protector solar es su sencilla y cómoda aplicación. Además ya casi todos incorporan un difusor que permite vaporizar el producto en todas las posiciones.
Algunos de ellos se pueden aplicar sobre la piel mojada, una opción ideal para los niños que siempre están en remojo.
Además, tiene una textura muy suave lo que permite que se absoba muy rápidamente.
Contras
Al igual que ocurre con el aceite seco en spray conviene pulverizarlo cerca de la piel y extenderlo un poco.
Y, sea cual la textura, siempre deberemos reaplicar el protector solar cada 2 horas.
En general, mis favoritos siguien siendo las cremas de textura ligeras (en el caso del rostro específicas para pieles mixtas/grasas).
Yo nunca he utilizado nada mas que cremas.
Siempre he odiado ponerme el protector solar porque odio las cremas, son untuosas y quedas pegajosa. Desde que descubrí las brumas, no las cambio por nada. Fácil aplicación y muy rápida absorción. Acabaron con mis problemas con la protección solar.
Un beso, guapa 🙂
Suelo utilizar cremas y sprays.