Los mejores alimentos para cada tipo de piel

La semana pasada te contaba qué limpiador facial elegir según tu tipo de piel y, en este post, te voy a hablar de cuáles son los mejores alimentos alimentos para cada tipo de piel.

La salud de la piel comienza en el interior. Si no cuidas tu alimentación, no esperes que tu piel luzca radiante, aunque uses los mejores productos de belleza. Una dieta sana y beber la cantidad de agua diaria recomendada serán dos aspectos fundamentales para garantizar la salud de tu piel y para potenciar el efecto de los tratamientos cosméticos.

Además, ahora que nos encontramos en verano, seguro que te interesará saber también cuáles son los mejores alimentos para cada tipo de piel que garanticen un bonito y duradero bronceado y que eviten los daños que pueden llegar a causar los rayos solares.

¿Preparada para descubrirlos? Pues, aquí los tienes.

Los mejores alimentos para cada tipo de piel

Cada piel es diferente y, por lo tanto, necesita diferentes cuidados y también distintos alimentos. Además de usar los productos de belleza más adecuados, es importante que cuides e hidrates tu piel desde dentro.

El equipo de expertos de Nutritienda, la tienda online líder en productos de salud y belleza, nos da las claves para descubrir cuál es el tipo de piel que tenemos y nos descubre las pautas alimentarias que debemos seguir si queremos cuidarla como es debido.

Piel seca

¿Notas la piel tirante e, incluso, áspera? ¿Le falta flexibilidad a tu tez? Entonces, tienes la piel seca. Las pieles se pueden cuartear y pueden presentar un aspecto bastante apagado. También puedes sufrir enrojecimiento y tener tendencia a la descamación, a la tirantez y al picor.

Este tipo de piel necesita, principalmente, hidratación y nutrición; y, en este sentido, la alimentación tiene un papel fundamental.

Por ejemplo, para reparar la piel, lo ideal es que incluyas en tu dieta alimentos ricos en antioxidantes como la vitamina A y C. Además, los alimentos que contienen buenas dosis de betacaroteno resultan buenos para restaurar esas zonas dañadas. En este grupo se incluyen los vegetales de hoja verde (espinacas) y frutas y verduras de colores anaranjados y amarillos (albaricoques, pimientos amarillos y rojos, zanahorias y calabazas).

Por otra parte, los alimentos ricos en vitamina B2 aportan brillo a la piel. Esta vitamina se encuentra en los de origen animal como carnes y los que contienen vitamina A, como los huevos.

Tampoco hay que olvidar la importancia del zinc. Los alimentos ricos en este mineral ayudan a reparar daños como la descamación, la picazón y promueven la suavidad de la dermis. El zinc se encuentra en el germen de trigo y en algunos pescados, como las sardinas.

Y no olvides los cuidados externos específicos. Exfolia la piel con productos no agresivos adaptados a sus necesidades y añade una gota de aceite esencial de lavanda a la crema que utilices cada noche antes de irte a dormir para favorecer su renovación celular.

Piel grasa

¿Tu piel tiene una textura irregular, brillos en la zona T del rostro o puntos negros? Si tu respuesta es sí, tu piel es grasa. Este tipo de tez, por lo general, presenta un exceso de sebo que provoca la obstrucción de los poros y da lugar a imperfecciones como granitos, puntos negros y brillos.

Si quieres mejorar el aspecto y la textura de la piel grasa, deberás incluir en tu dieta alimentos como las fresas, que aportan un efecto antiinflamatorio y evitan la inflamación que da lugar a una sobreproducción de sebo.

La piña es que, gracias a su contenido de bromelina, ayuda a la degradación de las proteínas y favorece la absorción intestinal evitando excesos de toxinas y lípidos. O el limón que remueve las células muertas gracias a su contenido en ácido alpha hidroxi.

Además, la piel grasa también demanda el consumo de alimentos con un alto poder diurético como las alcachofas o el pepino que, también, tiene un efecto calmante y refrescante para la piel; y también necesita alimentos ricos en Omega 3 (salmón, trucha y caballa) para favorecer el efecto antiinflamatorio.

Y, para completar tu rutina de cuidado de la piel, aplícate una mascarilla de arcilla verde una vez por semana. Este producto regula el exceso de grasa y favorece la cicatrización de la piel por lo que es perfecto, sobre todo, para pieles grasas con tendencia acneica.

Piel normal

¿Tu piel es suave, firme, está libre de imperfecciones y tiene un ligero tono rosado? Entonces, además de tener mucha suerte, tienes la piel normal. Ahora lo importante es seguir manteniendo su estado y, para conseguirlo, es fundamental que cuides tu alimentación.

Incluye en tu dieta alimentos que te aporten un plus de energía y antioxidantes como el tomate, zanahoria y naranja. Y no olvides aplicarte una crema hidratante a diario y exfoliar la piel del rostro una vez a la semana para eliminar las toxinas.

Alimentos comunes para todos los tipos de piel

Vegetales con colores vivos 

Mango, melocotón, albaricoque, calabaza o zanahoria. Estos alimentos de color anaranjado tienen este color debido a su contenido en alfa y beta-caroteno, precursores de la vitamina A, una sustancia imprescindible para la renovación celular, la protección del envejecimiento prematuro y el incremento de la producción de melanina, sustancia necesaria para el bronceado de la piel.

Frutas

Algunas frutas como el kiwi, fresa, naranja mandarina o limón tienen un alto contenido en vitamina C, un poderoso antioxidante, que protege las células de la piel e interviene en la formación de colágeno, una proteína necesaria para que la piel conserve la elasticidad y firmeza.

Alimentos ricos en vitamina E 

El aceite de oliva, el aguacate y las nueces son algunos alimentos ricos en vitamina E, que ayudan a neutralizar la oxidación de las grasas y la producción de radicales libres, manteniendo la piel más joven y cuidada.

Ácidos grasos Omega-3

Se encuentran principalmente en los pescados azules como el atún, la caballa, el salmón o los boquerones, entre otros. Protegen la piel de la deshidratación y actúan como agentes antiinflamatorios. Además, este este tipo de pescado es rico en vitamina D, un protector natural frente a las radiaciones ultravioletas.

Alimentos ricos en azufre

Alimentos como los espárragos, huevos, cebolla y ajo promueven el rejuvenecimiento de la piel y ayudan a mantener la piel hidratada, suave y flexible.

Agua

No olvides beber mucha agua y, en la medida de lo posible, evita los alimentos demasiado salados y con un alto contenido en sodio: retienen líquidos y acentúan la aparición de bolsas y ojeras.

Alimentos que preparan la piel para la exposición solar

Si quieres prevenir las quemaduras y conseguir un bronceado uniforme y bonito, además de usar un protector solar, también se recomienda tomar preparadores solares que te ayude a preparar la piel antes de exponerte al sol.

Estos suplementos alimenticios evitan el envejecimiento cutáneo, alergías, dermatitis, quemaduras y preparan la piel para los rayos UVA y UVB; también contribuyen a tener un bronceado más intenso y previenen el fotoenvejecimiento de la piel.

Su fórmula contiene Licopeno, con propiedades antioxidantes, y Beta-caroteno. Por lo general, se debe comenzar a tomarlas un mes antes de exponerse al sol, durante el tiempo de exposición y un mes después para mantener un mejor bronceado.