Adiós estrés con el masaje Bio-Energético de Chakras de Love in Care
El estrés al que nos vemos sometidos casi a diario hace que nuestro centros de energía se desequilibren.
Es entonces cuando nuestro cuerpo reacciona y nos manda señales de que algo no va bien. Nos sentimos más cansados, cogemos todos virus habidos y por haber o incluso aparecen los desagradables herpes, por ejemplo, en la zona de los labios.
Todo lo he vivido en épocas de estrés y sabía por lo que me pasaba, pero no cómo solucionarlo hasta que me invitaron a probar el Masaje Bio-Energético de Chakras de Aveda de Love in Care (Art Lab).
Art Lab se encuentra situado en la Calle Irún, nº 27 de Madrid y dispone de un centro de belleza y un centro de masajes y tratamientos, Love in Care, que es donde pude disfrutar de este maravilloso masaje.
Allí me recibió Irina, una de las terapeutas del centro, que me explico cada uno de los pasos de esta técnica ancestral.
El Masaje Bio-Energético de Chakras se inspira en la milenaria sabiduría de la Ayurveda, la medicina tradicional de la India.
Su función es restaurar la armonía física, mental, social y espiritual armonizando los centros de energía de nuestro cuerpo para conseguir un equilibrio interior que se refleje también en el exterior.
Las cartas que escogí fueron Enraizamiento (rojo), Lucidez (azul oscuro) y Sabiduría (violeta). Y acerté de pleno.
Después Irina me dio un relajante masaje en la cabeza y en los pies, para abrirme los canales energéticos y me dio a oler 3 aceites esenciales de Aveda.
Escogí el primero por su aroma cítrico y, de nuevo, volví a acertar con la elección .
Con este aceite comenzó a darme el masaje. Primero por la parte delantera comenzando por cabeza, la zona del tórax, brazos, piernas y pies (que es lo que consideran «un cubo de basura» energético en el que eliminar las malas energías).
Después, me di la vuelta e Irina repitió el mismo proceso, aunque empleándose a fondo en la espalda y eliminando así cada una de las contacturas que tenía.
Y, cuando terminó, me puso una toalla caliente en la espalda y permanecí unos minutos relajada antes de levantarme.
Una auténtica maravilla. No os dio más que, quitando el momento de las contracturas que me resultó bastante doloroso, me habría quedado dormida.
Después del masaje, me ofrecieron un té y, mientras me lo tomaba, Irina me estuvo comentando más sobre las cartas que había escogido.
Y según me iba contando qué significaba cada una de las cartas, me quedé con la boca abierto porque definían perfectamente el estado de ánimo en el que me encontraba y todos mis conflictos internos.
Salí de allí de lo más relajada y a día de hoy continúo en ese estado de calma. Es como si me hubiera liberado de la tensión acumulada y me siento mucho.
No es que haya sido milagroso pero ahora noto que estoy un poco menos nerviosa y que todo me ‘resbala’ por así decirlo, las cosas me afectan menos.
Y, algo muy importante, estoy más positiva (que ya me hacía falta).
Parece que mis chakras se han alineado y espero que este estado dure mucho tiempo y me permita acabar y el empezar el año con buen pien.
Precio: 80€
He oído este tipo de terapias e increiblemente parecía que funciona.Me encantaría probarlo :
Un beso!
El tocador de Mia.
No sé considero que no deja de ser un masaje. No pienso que vaya a dañar mi salud. De hecho me eliminaron las contracturas que tenía y además salí de lo más relajada. Aunque respeto tu opinión y entiendo tu recelo.
Gracias por comentar!
¡A mí desde luego me ha encantado la experiencia!
Besos!!!
Exactamente, a eso voy, un masaje realizado por un profesional, y además con un entorno agradable (e imagino que el poder parar un poco el ritmo diario) tiene efectos beneficiosos sí o sí. A lo que yo me refería es que en ningún caso «restauran la armonía» y «alinean los chakras». Y hay gente que basándose en esto lo utilizan como terapia para solucionar problemas médicos abandonando las terapias cuya efectividad está demostrada científicamente…no sé si me explico.
No lo he probado nunca y me gustaría mucho.
¡Claro! Para problemas de salud es mejor acudir a un especialista. Lo mío era por estrés y por problemas musculares 🙂
Un abrazo!