El Pilates ha llegado del pasado para quedarse
Hace algunas décadas pocas personas serían capaces de identificar el Pilates con un deporte. Hoy en día, sin embargo, raro es encontrarse con alguien que no lo practica o que no tiene algún conocido que dedica a esta práctica deportiva un par de horas a la semana.
Lo cierto es que el modo de vida que llevamos, marcado por el estrés y el sedentarismo, hace necesario incluir en nuestra cotidianeidad prácticas como esta, sobre todo si queremos conseguir, al fin y al cabo, un modo de vida saludable. Para muchas personas, su vida diaria es ya inconcebible sin incluir en ella prácticas como el Pilates, el yoga o la meditación.
El nacimiento del Pilates
La aparición de esta práctica tuvo lugar en un contexto histórico muy concreto y, en ella, tuvo mucho que ver el papel de un hombre llamado Joseph Hubertus Pilates.
Este alemán no solo le dio nombre, sino que además ideó su técnica. Nacido en 1880, Hubertus Pilates sufrió desde muy pequeño una serie de dolencias y enfermedades que lo llevaron, posteriormente, a querer estudiar el cuerpo humano.
Con ello buscaba un objetivo muy concreto: descubrir cómo fortalecerlo creando una serie de ejercicios combinados.
Para crear la técnica se basó en disciplinas como la gimnasia, la traumatología y el yoga. Su combinación permite compaginar aspectos como la respiración, la fuerza o el control de la mente. Todo ello de manera perfectamente coherente y coordinada.
De este modo, aunque recientemente parece haberse puesto de moda, este deporte lleva décadas poniéndose en práctica e intentando mejorar sus efectos sobre quienes lo practican.
¿Cómo practicar Pilates?
Una de las pruebas más claras sobre la expansión no solo de su práctica, sino también de los métodos para llevarla a cabo.
De esta manera, en la actualidad podemos practicar Pilates no solo si acudimos a un centro especializado, sino también creando una especie de gym en casa, en nuestro propio hogar.
Este tipo de facilidades creadas exprofeso, gracias a las aplicaciones, nos permiten compaginar nuestras obligaciones con el deporte y el bienestar.
En cualquier momento del día y durante el tiempo de que dispongamos podemos practicar Pilates siguiendo los consejos de un experto, ya sea en persona o a través de nuestro móvil. La gran cantidad de sesiones que recogen, facilitan la variedad de las clases y la posibilidad de ponerlas en práctica durante todo el año.
Ventajas sobre nuestro cuerpo
Más allá de la desconexión que aporta realizar un deporte, el Pilates nos ayuda a conseguir una serie de beneficios que notaremos con una práctica continuada del mismo.
La tonificación y definición muscular, la pérdida de peso, el aumento de nuestra flexibilidad y la mejoría de la postura de nuestro cuerpo en general son algunas de las más destacadas.
Además, sus efectos se dejan notar también en un plano más psicológico, lo que se manifiesta a través de la reducción del estrés, de la ansiedad o de trastornos relacionados con patologías como las depresiones. Las preocupaciones y la angustia que estas pueden llegar a producir se quedan a un lado, permitiéndonos dejar nuestra mente en blanco.
¿Ya practicas Pilates? ¿Qué es lo que más te gusta de este deporte?